Módulo Eliseo como discípulo y discipulador – Estudio 6.4.5

por Ilaene Schüler

(2 Reyes 6.1-7; Col 1.3-8)

¡No solo! Este grito de guerra se ha convertido en una cultura de seguimiento.

Para alguien que tenía una cultura de caminar solo y tomar decisiones de forma independiente, esta cultura de tener a alguien que me acompañara en mi vida fue un proceso interesante que trajo grandes cambios. Hoy no renuncio a tener personas que a través de una relación de discipulado me ayuden a crecer. ¡No solo!

Ahora es común escuchar a David pedir que al final de un tiempo de consultoría guardemos silencio y cada uno escriba un punto destacado y un punto de crecimiento de nuestro tiempo juntos en consultoría. Hacemos lo mismo en nuestro microgrupo de discipulado, permaneciendo en silencio, escuchando a Dios y compartiendo toques divinos del encuentro. Una cultura de intercambio, seguimiento y rendición de cuentas.

En 2Re 6,1-7, Hubo un pedido de los discípulos para que Eliseo estuviera con ellos mientras realizaban la tarea de talar árboles para ampliar el alojamiento de la casa. Demuestran la importancia de tener a Eliseo juntos. Pedir va en contra de la autosuficiencia, pues es una forma de expresar que quieres ayuda en una necesidad. En el caso de los discípulos de Eliseo, expresan la necesidad de tenerlo con ellos. Eliseo los acompañó, podemos entender que no estaba talando árboles. En el acompañamiento, en el estar juntos, surge la oportunidad para que sus discípulos experimenten la manifestación del poder de Dios. 

Estar junto a las personas con quienes caminamos en discipulado en otras tareas, ¿cómo sería eso?

La relación entre Epafras y Pablo es otro ejemplo de acompañamiento personal en una relación de discipulado. (Cl 1.3-8)

Pablo describe a Epafras como un consiervo suyo. Pablo sirve a Epafras y ambos sirven a la iglesia. Epafras tiene a alguien por encima de él que es interdependiente en cuanto a su acompañamiento en la iglesia de Colosas. Por lo tanto, tiene la autoridad de Pablo sobre él, lo que le da apoyo para servir. El servicio de Epafras es afirmado por Pablo, que los recuerda y les agradece, incluso sin conocerlos personalmente.

Pablo escribió esta epístola cuando estuvo encarcelado por primera vez en Roma, aproximadamente entre los años 60 y 62 d.C. Las limitaciones de Pablo por estar encarcelado no le impidieron encontrar una manera de contribuir al crecimiento de la iglesia colosense. Pablo se refiere a Epafras como “nuestro amado colaborador” y a la iglesia de Colosas como un “fiel ministro de Cristo”. El acompañamiento de Pablo a Epafras resultó en el crecimiento de la iglesia.

Mi limitación, ya sea edad, tiempo o lo que sea, puede ser la oportunidad para el crecimiento de otros delegando y así dejando un legado.

Para crecer intencionalmente a nivel personal necesitamos experimentar un discipulado intencional y transformacional que nos lleve a la madurez en Cristo. Sin embargo, el apoyo, ya sea a través del discipulado o del consejo, debe estar al nivel de influencia que tengamos en el reino de Dios.

Si somos pastores de una iglesia local necesitamos un asesor, un experto con una perspectiva externa que nos acompañe y no alguien a quien buscamos sólo porque estamos viviendo una crisis.

¿Se nota que es alguien acompañado? 

¿Tienes personas que te acompañan en el discipulado en tu proceso de madurez espiritual? 

¿Tiene un asesor que le ayude a crecer en el ministerio al nivel de influencia que Dios le ha puesto en el reino, ya sea como líder ministerial, líder de grupo pequeño, pastor de una iglesia local o líder de un movimiento de discipulado?

Discipulado en la Vida – 13/10/2022
Curso: Personajes Bíblicos
Módulo 6.4: Eliseo como discipulado y discipulador
Estudio 6.4.5: Apoyo personal

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